Hoy es como 31 de diciembre. Se percibe como una frontera a un nuevo mundo la salida a la nueva normalidad que, al igual que el 1 de enero, es lo misma al día que le antecede. Seremos mañana los mismos que hoy lo somos, nada cambia tan rápido. Hoy domingo regresa esa sensación del termino de fin de semana, siendo que este duro mucho más. Entré a mi closet para ver el estado de mis zapatos, ¿se acordarán de mí? habrá cedido terreno el cuero que los compone para lastimarme, es algo que hasta mañana que salga de mi casa lo sabré, por el momento quiero disfrutar unas horas más de la antigua realidad.